España obtuvo más de 1.100 millones de euros en ayudas directas para financiar actividades de I+D entre 2014 y 2015.

Acaban de darse a conocer los primeros resultados de Horizonte 2020 (H2020), el gran programa de financiación europeo de I+D a través del que se van a invertir 80.000 millones de euros (sí, no sobran ceros) en siete años.

Los resultados para España son muy buenos, no cabe hacer otro análisis. Somos el cuarto país en fondos obtenidos, y el porcentaje de retorno económico ha pasado del 8’3 al 9’7% del total. Esto se traduce en más de 1.100 millones de euros de ayudas directas para financiar actividades de I+D en España entre solo 2014 y 2015.

A nivel regional los datos también son positivos: 71 actividades aprobadas en los dos primeros años de Horizonte 2020 contaron con participación de entidades de Castilla y Léon (universidades, empresas, asociaciones…), y 21 de ellas estaban coordinadas desde la región. En total, el volumen de inversión captada sobrepasa los 30 millones de euros, lo que nos coloca en sexta posición a nivel nacional, por detrás de Cataluña, Madrid, el País Vasco, la Comunidad Valenciana y Andalucía.

En las universidades hace tiempo que venimos fomentando la participación de nuestros grupos de investigación en el H2020. La competencia es fortísima, porque rivalizan proyectos no solo de la UE, sino de otros países que se han incorporado al programa y contribuyen a su financiación. De hecho, la tasa de los que reciben las ayudas es muy baja, de media el 12%. Pero las cantidades recibidas compensan el trabajo, ciertamente agotador, de presentación, gestión y rendición de cuentas.

Las universidades españolas obtienen el 20% del dinero que recibe España, y en el caso de Castilla y León ese porcentaje se eleva a casi el 24%. Es una buena noticia y un síntoma de que el panorama no es tan siniestro como se presenta en algunos rankings y clasificaciones publicadas recientemente. Además los grupos de investigación de nuestras universidades ya lo han interiorizado. Entre 2013 y 2015, se han quintuplicado las solicitudes de ayuda a programas europeos en la Universidad de Salamanca, aumentando significativamente el número de proyectos en los que estamos trabajando.

Los proyectos para H2020 se llevan a cabo en forma de consorcios en los que participan distintas organizaciones, entre ellas empresas. De hecho son las mayores receptoras de ayudas en términos netos. En el caso de España el 39% de los fondos captados (35% en Castilla y León). Y las áreas en las que más recursos se están obteniendo en H2020 son innovación en las pymes, nanotecnología, energías y TIC.

En un escenario local, de ayudas menguantes a la I+D, la vía europea es clave para que todos, universidades, empresas, administraciones, centros tecnológicos y centros de investigación, colaboremos en el esfuerzo de captar más recursos y poner en marcha proyectos cada vez más ambiciosos. En ello estamos.